En una iniciativa conjunta con Fundación Nodos, Cooperativas de las Américas canalizó la visita de una delegación de cooperativistas de cuatro países para que conozcan de primera mano experiencias de integración centenarias en la nación sudamericana.
Un grupo de cooperativistas de Puerto Rico, Perú, Paraguay y Uruguay recorrió durante una semana distintas entidades argentinas para aprender sobre su trayectoria y experiencia de integración.
Se trató de una pasantía formativa organizada por Cooperativas de las Américas junto a la Fundación Nodos, que abrió las puertas de la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), del sector agropecuario; del Grupo Asegurador La Segunda; de Avalian (salud) y de Coovaeco (turismo).
Esta primera pasantía incluyó la visita a las instalaciones de la Cooperativa La Vencedora, centros de desarrollo cooperativo, una planta de bioetanol, el puerto de ACA en la provincia de Santa Fe, el campus cooperativo de La Segunda, un criadero de semillas y un laboratorio biotecnológico.
En la última jornada, la delegación conoció la casa central de ACA y, posteriormente, realizó una visita a la sede de la confederación argentina Cooperar, donde los recibió el secretario de esa organización y secretario a su vez del Comité Ejecutivo de Cooperativas de las Américas, Ricardo López.
“La pasantía fue un desafío y tengo la satisfacción de saber que realizamos un gran trabajo. Los participantes vivieron con mucha claridad todo lo que nuestro movimiento cooperativo representa”, consideró el presidente de Fundación Nodos, Claudio Soumoulou.
Graciana Mujica, directora ejecutiva de la entidad, agregó: “En cada uno de los puntos que recorrimos, el trabajo de integración fue sabernos parte de esta experiencia. Los viajeros sintieron ese sentido de integración cooperativista”.
La pasantía día por día, en primera persona
Claudio Soumoulou, presidente de la Fundación Nodos, relata cómo vivió estos días junto a la delegación visitante y deja sus impresiones para futuras pasantías:
“La pasantía se venía planificando ya desde hace un tiempo junto con Cooperativa de las Américas, con la posibilidad de que grupos de cooperativistas de distintas partes del continente puedan venir a conocer lo que es el ecosistema que gira en torno a la Asociación de Cooperativas Argentinas. Esto permite conocer todo el grupo cooperativo, mirándolo desde el eslabón principal que es el productor agropecuario.
Por eso la pasantía arrancó en una cooperativa de primer grado, donde además conversaron con un productor agropecuario asociado a la cooperativa, es un productor promedio de la zona, y compartieron un almuerzo con los dueños del campo y con parte del consejo de administración de la cooperativa.
Luego pasamos en el segundo día a conocer un centro de desarrollo cooperativo, contando la historia de que son acopios directos que tiene la Asociación de Cooperativas Argentinas y que se desarrollaron a partir de una crisis surgida en la década del 90, donde lamentablemente perdimos algunas cooperativas.
El objetivo de estos CDC, además de mantener el desarrollo de negocios, fue mantener la presencia cooperativa en aquellos lugares donde no había cooperativas cerca, donde las cooperativas ya no estaban. Se conoció el trabajo que hacen, comentando la parte histórica de por qué se desarrollaron.
Después empezamos a meternos en los desarrollos de negocios del grupo cooperativo. Visitamos ACA Bio, una cooperativa integrada por ACA y por 59 cooperativas más que tiene como objetivo principal la producción de biocombustibles, en este caso bioetanol a partir del grano de maíz. O sea, una forma de darle valor agregado al maíz y además poder producir alimentos para animales, recuperar dióxido de carbono y el etanol para el corte de naftas que queda en el mercado local y también algo que se exporta a la Unión Europea.
De allí viajamos a la ciudad de Rosario, donde pudimos conocer el puerto de Timbúes, que es el último inaugurado y uno de los cuatro puertos propios que tiene la ciudad de Rosario, donde allí nos recibió el presidente de ACA junto con el presidente de ACA jóvenes y toda la mesa directiva, para contarnos qué es la Asociación de Cooperativas Argentinas hoy.
Pudimos recorrer el puerto de punta a punta, visitando no solamente gran parte de las dependencias, sino conociendo la política de inclusión laboral que tiene el puerto, donde trabajan hoy 14 personas con discapacidad en distintas áreas pero fundamentalmente en las más importantes como es la carga de buques.
Después nos fuimos a recorrer un espacio para la tercera edad que se llama Sentidos, que está desarrollado por Avalian, que es la cobertura médica del grupo cooperativo, que también es una cooperativa, y que cuenta con ese predio en la localidad de Funes, en la provincia de Santa Fe, donde pudimos ver aproximadamente unas 50 personas que decidieron pasar su vida allí y hoy están en un complejo que ofrece todas las condiciones para tener en esta etapa de la tercera edad las mejores condiciones posibles.
A unos 14 kilómetros de Rosario conocimos el edificio corporativo de La Segunda, que se llama Núcleo. El grupo fue recibido por todo el consejo de administración para luego poder meternos en dos charlas que hablaban sobre innovación y sobre sostenibilidad que La Segunda viene desarrollando a partir de distintos programas. Fue una capacitación intensa, de 2 horas, donde pudimos conocer en detalle qué está pensando y de qué manera está trabajando el grupo asegurador.
Saliendo desde allí pasamos por el criadero de semillas que tiene ACA en la ciudad de Pergamino, para conocer el laboratorio de desarrollo biotecnológico donde se desarrollan variedades básicamente de lo que es trigo y soja, además de girasol y sorgos, y donde recibimos una charla sobre todo el proceso de trabajo que se hace en este laboratorio desde el momento en que se empieza a pensar y a desarrollar una variedad, o sea de trigo, de soja o de algunas otras especies.
Finalmente, partimos a la ciudad de Buenos Aires para finalizar el día viernes por la mañana en la sede de la Fundación Nodos, donde les contamos cuáles son los aspectos más importantes que trabajamos desde la fundación y luego hacer una pequeña actividad de evaluación en conjunto, de considerar qué les había parecido la pasantía, qué cosas creían que teníamos que mejorar, qué cosas creían que teníamos que agregar o modificar de lo que habíamos hecho, pensando en futuros grupos que puedan venir.
Fue una experiencia fantástica, una semana muy linda con cooperativistas de Perú, de Puerto Rico, de Paraguay y de Uruguay, un total de 11 personas. La evaluación que podemos hacer es altamente positiva. Hay un buen espacio dentro de este grupo cooperativo como para mostrar y seguir mostrando lo que el grupo viene haciendo desde hace tantos años a esta parte, y la verdad que tenemos expectativas de lo que pueda surgir con esta pasantía de aquí para adelante.”